Outumuro, Ortigossa, Matisse, Picasso y la eclosión del fotolibro en la Unión Soviética, novedades editoriales de junio

El verano llegará a La Fábrica con una amplia oferta de novedades editoriales entre las que encontraremos a grandes maestros de la fotografía, artistas plásticos y nombres fundamentales de la historia del arte, así como un volumen que profundiza en la eclosión de las revistas y y los fotolibros en la Unión Soviética entre 1913 y 1941.

Con motivo de la exposición Matisse. Grabador en la Fundación Canal de Madrid se ha editado un libro que profundiza en esta faceta del genial pintor. Matisse ejerció como grabador de manera regular entre 1900 y su muerte, en 1954. Su obra grabada comprende más de ochocientas piezas que conforman una gigantesca biblioteca visual, un completo documento sobre su proceso de trabajo y su manera de convertir en arte aquello que veía.

Este libro recoge 63 de sus grabados en los que identificamos el mismo proceso de observación que el artista seguía
en sus dibujos. Un fascinante volumen que nos descubre a un Matisse diferente, más íntimo y cercano, que sin embargo contiene en cada obra las claves de su genio universal.

Otro genial de la pìntura universal, en este caso Pablo Picasso es el protagonista del libro Picasso, la mirada del fotógrafo, editado con motivo de la exposición homónima en el Museo Picasso de Barcelona. Este libro propone una inmersión en el universo de Picasso a través de la fotografía y reúne imágenes que recorren todas las facetas de un creador que es a la vez autor, modelo, testigo y espectador de su obra y de su vida. Un paseo fotográfico de taller en taller muestra la riqueza multidisciplinaria de su obra, donde la experimentación es la prioridad, con independencia de la técnica y el soporte utilizados.

El volumen recoge multitud de imágenes en torno a su relación con la fotografía, junto con textos de grandes expertos mundiales en su obra.

El libro Works 2002 – 2018 de Nicolás Ortigosa recoge diversos trabajos de Nicolás Ortigosa, entre ellos su particular interpretación de La Divina Comedia, de Dante Alighieri, una serie compuesta por 89 dibujos y grabados de distintas técnicas que plasman las imágenes mentales que generó en él la lectura del clásico italiano. Los variados formatos y soportes en que se muestran sus dibujos reflejan un carácter más lírico que ilustrativo, y están más vinculados al lenguaje abstracto que al figurativo. Las obras, realizadas entre 2002 y 2018, recogen dieciséis años de trayectoria artística de este interesante artista.

El volumen, que se edita con motivo de la exposición que dedica el centro de arte Bombas Gens a este autor, incluye otros trabajos representativos suyos, como una muestra de sus dibujos y grabados más actuales, de muy diversos tamaños y realizados entre 2015 y 2018.

El retrato llegará de la mano de Manuel Outumuro,uno de los  grandes fotógrafos de moda de España, cuyo archivo —de más de 10.000 imágenes— conforma un documento único que refleja buena parte de la historia de la moda española en los últimos veinticinco años.

Además, es un excelente retratista y en este volumen antológico recoge una amplísima selección de fotografías, donde encontramos rostros conocidos de todos —de Juliette Binoche a Manolo Blahnik, de Diane Kruger a Pedro Almodóvar, de Penélope Cruz a Ferran Adrià—, un retrato único de las celebrities desde el objetivo de este gran maestro.

De la mano de PHotoESPAÑA llegará la ultima novedad editorial para el mes de junio; Vanguardia y propaganda. Libros y revistas en la Rusia soviética. Este libro reúne una selección de publicaciones —fotolibros y revistas, junto con otros documentos relacionados— que dan muestra de la gran eclosión de la tipografía, el fotomontaje y el fotolibro en la Unión Soviética durante el periodo comprendido entre 1913 y 1941. El arte aplicado a la producción de libros y revistas alcanzó su máximo esplendor con las vanguardias de comienzos del siglo XX y cobró especial relevancia en la Unión Soviética, como queda patente en este espectacular volumen. Todo ello, gracias al auge de corrientes artísticas como el suprematismo y el constructivismo, y también por la alianza entre artistas y diseñadores gráficos rusos, y sus estrechas conexiones con el ámbito poético-literario.